Marc Márquez ha vuelto con prudencia. Tras un año de calvario por las operaciones en su brazo derecho, es consciente de que su regreso tiene que ser poco a poco hasta alcanzar el 100%. En Jerez fue noveno, dejando buenas sensaciones.
Ahora el paddock de MotoGP se traslada a Le Mans, donde el ocho veces campeón del mundo quiere seguir con su mejora para acercarse todo lo posible al podio. Se ve bien, "cada día más fuerte", avisa. "Ha sido una buena semana entre carreras, he podido descansar y continuar mis entrenamientos y recuperación. El objetivo de este fin de semana es tener menos complicaciones y seguir trabajando para mejorar", afirma en declaraciones recogidas por Repsol Honda.
"Paso a paso nos estamos haciendo más fuertes y nuestro objetivo es continuar el progreso que hemos estado haciendo. El clima en Le Mans siempre puede hacer las cosas un poco complicadas, pero lo gestionaremos pase lo que pase", detalla el español.
Le Mans es uno de sus circuitos favoritos. Allí ha logrado tres victorias y otros cuatro podios. Uno de los trazados donde más ha brillando. En este 2021, aunque consciente de que debe ir poco a poco, quiere dar ese salto de calidad en Francia para acercarse a los mejores.
No solo Márquez tiene que trabajar para mejorar, también Repsol Honda. La moto no está respondiendo como en el pasado y el propio Pol Espargaró ha lanzado un mensaje muy claro al equipo: "Yo creo que estamos haciendo mucho individualmente pero no como un equipo".
Ambos pilotos han realizado test privados en los últimos días en busca de esos pequeños detalles para perfeccionar la Honda. De momento tanto Márquez como Espargaró parecen lejos de la cabeza, pero todo puede pasar en una temporada de MotoGP en la que la igualdad vuelve a reinar.