Este Gran Premio de Alemania no está siendo el soñado por Marc Márquez. Todo comenzó a torcerse con una caída en los entrenamientos libres que le impidió meterse en la Q2 directo, obligándole a pasar por el siempre amargo trago de la Q1.

Y más amargo que fue cuando Stefan Bradl le bloqueó en su vuelta rápida en la clasificación, por lo que Marc no pudo superar la decimotercera posición. En la carrera al sprint pudo ganar siete posiciones para llegar al sexto puesto, aunque eso no es suficiente para un Márquez que sabe poco a poco se le van escapando las opciones de ganar el título.

"Ya dije que si hacía el fin de semana perfecto iba a poder luchar con los de arriba. Pero he hecho un fin de semana desastroso, el peor del año. Han salido todos los problemas posibles, así que toca salvarlo mañana", comentó el piloto español tras la carrera al sprint.

Sin embargo, no todo es negativo, ya que el '93' terminó satisfecho con su ritmo de carrera: "Por más que Sachsenring se me haya dado bien en el pasado, salir el 13º te complica mucho la vida, porque solo hay dos puntos para adelantar. Me quedo que, con vueltas limpias, rodé en los mismos tiempos que los de la cabeza".

La carrera de este domingo tampoco será fácil, ya que arrastra molestias físicas como consecuencia de la aparatosa caída que sufrió el viernes. "Tengo un golpe fuerte en las costillas, que me duele mucho cuando me suben las pulsaciones. A ver cómo me levanto", dijo Marc Márquez para concluir.