Más de 1.000 días después Marc Márquez volvió a ganar en MotoGP. Fue en el Gran Premio de Aragón en un fin de semana perfecto: triunfo en el sprint y en la carrera del domingo. Y el paddock se pregunta ahora si llegará para luchar por el campeonato del mundo.

Este jueves, en la previa del Gran Premio de San Marino, le preguntaron por sus opciones: "Me gustaría no quitarme de la ecuación, y quedan muchos puntos, pero tenemos que ser realistas. Un Gran Premio no cambia todo. En Silverstone ganó Bastianini, no cambia todo, en Aragón gané yo, tampoco cambia", dice.

"Me gustaría ir recortando puntos, pero hasta ahora han sido los dos pilotos con más constancia, siempre van a ir bien, va a ir rápidos, creo que seguirá siendo así, pero nosotros intentaremos estar lo más cerca posible y buscar esa constancia para estar entre los 3 o 4 primeros", dice el tercer clasificado por detrás de Jorge Martín y Pecco Bagnaia.

Y aunque reconoce que en Aragón se dieron las condiciones perfectas, no descarta volver a estar en la pelea este fin de semana en Misano: "Las condiciones del Gran Premio de Aragón, un circuito que me gusta, pero a parte las condiciones con las lluvias, más que el asfalto, que ensuciaron la pista, eran mis condiciones".

"Son en las que siempre me he encontrado a gusto. Aquí en Misano habrá más agarre, habrá más grip, e intentaremos gestionar de la mejor manera y estar cerca de los dos que han marcado la pauta este año", sentencia Marc.

Quedan ocho carreras y la distancia con Martín es de 70 puntos. Y Márquez ha comenzado su plan de remontada.