Honda está en el peor momento deportivo de su historia en MotoGP. Su moto está tan lejos en términos de rendimiento de las marcas europeas que llevó a Marc Márquez a renunciar a su último año de contrato con los japoneses para marcharse a una Ducati satélite. Camino inverso hizo Johann Zarco, que al probar la Honda solo puedo elogiar al '93' y su rendimiento de los últimos años con una moto tan poca competitiva.
El francés, que ha firmado con Honda a través del equipo satélite del LCR, habló con MotoGP en la presentación de su equipo, donde definió la etapa que tendrá durante sus dos años firmados en la marca del ala dorada: "Un nuevo proyecto para desarrollar".
Y lo visto durante el test de Sepang, aunque continúan lejos del rendimiento de Ducati, invita a ser optimistas con un claro paso adelante. Así, Zarco podrá mejorar los resultados de Honda el año pasado, donde siempre cerraban la clasificación: "Afortunadamente, con la nueva moto parece que esa no será la situación para la temporada 2024, y por eso estoy muy contento. Si hacemos un buen trabajo y luchamos por algunos podios, será increíble. Por qué no, es una chispa que quiero mantener viva mientras esté en MotoGP".
La mejora de la moto de la temporada pasada a esta se estima en unas siete décimas por vuelta (en concreto respecto a lo visto en Sepang). Y Zarco, que probó la moto 2023 en Valencia, solo pudo alabar el rendimiento de Marc Márquez en el Repsol Honda tras haber probado la que fue su montura.
"Estoy muy impresionado con lo que hacía Marc Márquez con la Honda antigua, era el único que estaba delante aunque se cayera o no pudiera acabar bien las carreras. Es increíble lo que hacía, siempre era capaz de ser rápido y para mí no era posible hacerlo con la moto antigua. Estoy contento de tener la nueva, porque estoy jugando con ella, y eso es bueno", explicó.