Perdió los dos primeros sets, pero no se rindió. Lo de Carlos Alcaraz a sus 18 años es de locos. Ante Mateo Berrettini, el número 7 del mundo, firmó el que ha sido su mejor partido de todavía su corta carrera.
Más de cuatro horas de partido. Todo se resolvió en el tie-break del quinto set antes de que Alcaraz salvara una bola de partido. En el desempate el italiano fue mejor y aprovechó los errores del español.
2-6, 6-7, 6-4, 6-2 y 6-7 fue el resultado final de esta tercera ronda del Open de Australia. La grada vibró con un emocionante partido y recompensó a Alcaraz con una sonora ovación al finalizar el encuentro.
A sus 18 años Alcaraz ha demostrado que poco a poco sigue dando pasos de gigantes ante su mejor tenis. Capaz de competir con los mejores, ante Berrettini el 7 del mundo este viernes, el tenista se marcha de Australia con un buen sabor de boca.
Porque su tenis ha mejorado... y también su físico. Alcaraz se ha musculado en los últimos tiempos, cambiando por completo su físico. Alcaraz ya está aquí. Y seguro que dará muchas alegrías al tenis español en el futuro.