Manos arriba y pidiendo el apoyo del público. Un público, el de Riad, que casi por primera vez se ponía de pie en esta exhibición de la Six Kings Slam. Lo consiguió un Novak Djokovic que da igual el partido que sea. Siempre competirá hasta la última pelota.

Firmó el punto del partido en el tercer set para recuperar el break de Jannik Sinner. Una defensa férrea.

Pero no le fue suficiente para llevarse la victoria. La final la jugará el italiano Sinner, que se llevó el partido en tres mangas.

El domingo ya espera rival. Y será español: o Carlos Alcaraz o un Rafa Nadal que está jugando el penúltimo torneo de toda su carrera.