El Supremo investiga su patrimonio

Cuatro delitos, cuatro negaciones: Ábalos insiste en su inocencia pese a los "indicios" que le acorralan

Sí, pero... El Tribunal Supremo ha pedido este miércoles un suplicatorio al Congreso para retirar la inmunidad del exministro y ahora diputado del Grupo Mixto al observar "bastantes indicios" de ilegalidad.

Los cuatro delitos que acorralan al exministro José Luis Ábalos

El juez Leopoldo Puente del Tribunal Supremo ha analizado los informes, ha escuchado a los protagonistas y ha decidido que va a investigar el patrimonio del exministro y ex número dos del PSOE José Luis Ábalos, al apreciar beneficio económico en el piso de su expareja, Jéssica, así como en las viviendas de Cádiz y de Madrid ubicada en el paseo de la Castellana. Es por ello que su defensa ha presentado un archivador con miles de páginas al que ha accedido laSexta.

Pese a negarlo hasta el último momento, el Alto Tribunal encuentra indicios de la comisión de al menos cuatro delitos. Por un lado, el de integración en organización criminal que Ábalos negaba hace apenas dos meses asegurando que no formaba parte de "ninguna trama". Sin embargo, ahora el magistrado considera que lo habría hecho "activamente".

A ello se suma el tráfico de influencias al observar el magistrado indicios por los que se habría valido de su condición de ministro de Transportes para favorecer la adjudicación de contratos públicos. Adjudicaciones por las que habría recibido contraprestaciones y sobre las que al haber sido preguntado nunca respondió.

Respecto al tercer delito, el de cohecho, el juez, Leopoldo Puente, considera que el chalé de la Línea de la Concepción, el apartamento en el que vivía su pareja Jéssica o el piso del paseo madrileño de la Castellana, fueron pagos a Ábalos por parte del empresario Víctor de Aldama. Sobre ellos también evitó responder.

Eso sí, tal y como ha podido comprobar laSexta, en la documentación aportada por la defensa de Ábalos se incluyen, al menos, los justificantes de pago del inmueble en la costa gaditana. Por último, se le atribuye un delito de malversación, pues habría aportado información para que la trama fuera adjudicataria de contratos más ventajosos.