El apartamento en la playa alcanza precios nunca vistos. Si vivir en las grandes ciudades se ha vuelto casi imposible, vivir junto al mar no lo es menos. De media, un apartamento de unos 80 metros cuadrados en una localidad costera cuesta más de 180.000 euros. Concretamente 186.160€.

Aunque hay sitios donde ese precio se multiplica hasta por tres. Este es el caso de Ibiza, donde rozan el medio millón de euros y el metro cuadrado alcanza los 7.000 euros. Un precio que dificulta, y mucho, el problema de la vivienda en la isla Pitiusa.

Una situación similar ocurre en Sitges. En este municipio barcelonés se llega a pagar algo más de 400.000 euros de media. Más o menos lo que se paga también en Marbella.

Los precios están en máximos porque se han convertido en destinos muy demandados, donde la oferta de vivienda es ya de por sí insuficiente y donde el alquiler turístico encarece el suelo.

Pero también hay municipios españoles costeros donde comprar una vivienda es más asequible debido a que tienen menos demanda turística. En la costa de Huelva, en Lepe, podemos encontrar un apartamento por poco más de 80.000 euros, aunque los más económicos los encontramos en la costa gallega, concretamente en Marín, donde las viviendas son un 15,6% más baratas que en 2023. Esto hace que podamos encontrar un apartamento en la playa por una media de 76.000 euros.