Los grandes escollos de una empresa pública de vivienda: las dudas que ni el Gobierno sabe despejar (aún)

La creación de la empresa pública de vivienda anunciada por Pedro Sánchez deja algunas dudas que la propia ministra del ramo, Isabel Rodríguez, no ha sabido despejar este lunes. La medida, se ha limitado a indicar, "da continuidad a lo que venimos diciendo: todos los recursos del Estado para dar respuesta a un problema muy importante que hoy tienen los españoles".

Es una solución para atajar el problema, pero no a corto plazo, según los expertos, pues tardará "aproximadamente unos dos años hasta que esté operativa". "La creación puede ser rápida, pero hasta que esté 100% operativa muy probablemente lo veremos ya operando a finales de mandato", ha advertido este lunes en Al Rojo Vivo Eduardo González de Molina, investigador de vivienda en la University College de Londres.

Otro escollo es la gestión del suelo: las competencias están en manos de las comunidades autónomas y las trabas administrativas dilatan el proceso. "No puede ser que los suelos en desarrollo tarden 20, 25, 30 años en desarrollarse", reclama en este sentido Óscar Rey, constructor. La nueva ley del suelo pretende reducir esos tiempos, pero ahora mismo está bloqueada por falta de acuerdo. Para González de Molina, "estamos teniendo una crisis de ejecución". "Solo hay 2.000 vivienda públicas de alquiler construidas al año", incide.

El Gobierno ya ha puesto en el horizonte el desarrollo de miles de viviendas en más de una ocasión y por eso este nuevo anuncio también se ha recibido con escepticismo. "Es un titular electoralista más de los muchos que llevamos escuchando durante los últimos 6 años", asevera Valeria Racu, portavoz del Sindicato de Inquilinas. Para Francisco Iñareta, portavoz del portal inmobiliario Idealista, "más bien parecen un brindis al sol en un contexto casi de mitin que unas medidas que puedan llegar a algo real".