Daniel Sancho está siendo trasladado este viernes a la prisión de Surat Thani. Así lo han confirmado varias fuentes a la agencia Efe, a la que el propio reo avanzaba su traslado, que también confirmó la cárcel de Samui, donde se encontraba hasta ahora el joven español, condenado a cadena perpetua por el asesinato premeditado del cirujano colombiano Edwin Arrieta.

Durante una visita este viernes en la prisión de Samui, Sancho adelantó en declaraciones a la citada agencia que le iban a trasladar a la cárcel de Surat Thani de manera "inmediata". La propia prisión, por su parte, trasladó a Efe que el traslado del preso se realizaría primero en furgón blindado y luego en barco, pues la cárcel de Surat Thani está en territorio continental, a unos 100 kilómetros de distancia.

Tras conocer su condena a cadena perpetua, Sancho pidió al juez quedarse en la prisión de Samui, considerada "amable" en Tailandia, si bien el centro no aloja a presos condenados a más de 15 años de cárcel.

La de Surat Thani, en cambio, incluye a presidiarios condenados a partir de los 15 años de cárcel y hasta la pena de muerte. Se trata de una cárcel unas 10 veces más poblada que la de Samui, con 4.730 prisioneros y 626 prisioneras, según cifras del Departamento de Correccionales, considerada masificada por varias organizaciones.

Con su traslado a Surat Thani, el cocinero elude no obstante la cárcel conocida como 'El Gran Tigre', situada en Bangkok y considerada uno de los centros penitenciarios más peligrosos del mundo.

Sancho, de 30 años, fue visitado este viernes por la mañana en la cárcel de Samui por su padre, el actor Rodolfo Sancho, mientras algunos equipos de televisión aguardaban a las puertas de la prisión. Tanto Rodolfo Sancho como la madre del condenado, la analista de inversiones Silvia Bronchalo, acompañaron el jueves a su hijo durante la lectura de la sentencia en una vista a puerta cerrada en el Tribunal Provincial de Samui.

El jueves se hizo pública la sentencia por la que la Justicia de Tailandia condena a Daniel Sancho a cadena perpetua por el asesinato premeditado de Edwin Arrieta el 2 de agosto de 2023 y por los dos otros delitos que se le imputaban: ocultación del cadáver y destrucción de documentación ajena. Además, ha sido condenado a pagar una indemnización de 107.000 euros a la familia de la víctima.

El tribunal indicó que la condena se había visto reducida de la pena de muerte a la cadena perpetua por la colaboración del acusado, cuyos abogados, no obstante, han avanzado ya que recurriránel fallo judicial.