Nicolás Petro, el hijo mayor del presidente de Colombia, Gustavo Petro, ha sido detenido por orden de la Fiscalía de Colombia por los presuntos delitos de blanqueo de capitales y enriquecimiento ilícito. La Fiscalía también ha solicitado el arresto de la expareja de Nicolás Petro, Day Vásquez, por blanqueo de capitales.
"La Fiscalía General de la Nación se permite informar de que el 29 de julio, en cumplimiento a lo dispuesto por el Juzgado 16 Penal Municipal con Función de Control de Garantías de Bogotá, se hicieron efectivas las órdenes de detención contra Nicolás Fernando Petro Burgos (...) y Daysuris del Carmen Vásquez Castro (...) por hechos ocurridos desde 2022 a la fecha", ha señalado la entidad a través de un comunicado. Así, Petro y Vásquez serán puestos a disposición de un juez penal municipal.
En respuesta a esta detención, el presidente colombiano ha publicado un mensaje en la red social X, antes conocida como Twitter, en el que reconoce que le "duele mucho tanta autodestrucción" y que uno de sus hijos "pase por la cárcel". En cualquier caso, Petro ha asegurado que la Fiscalía tendrá "todas las garantías" por su parte "para proceder de acuerdo a la ley".
"Como afirmé ante el fiscal general, no intervendré ni presionaré sus decisiones; que el derecho guíe libremente el proceso", ha subrayado, a lo que ha añadido: "A mi hijo le deseo suerte y fuerza; que estos sucesos forjen su carácter y pueda reflexionar sobre sus propios errores".
La detención de Nicolás Petro sacude Colombia
La detención de Nicolás Petro Burgos, primogénito del presidente colombiano, Gustavo Petro, investigado por los delitos de lavado de activos y enriquecimiento ilícito, sacude al país y al Gobierno de Colombia cuando el mandatario todavía no ha cumplido su primer año en el poder.
Petro Burgos fue detenido este sábado en Barranquilla, capital del departamento del Atlántico, del cual es diputado, por la Fiscalía, que también arrestó a su exesposa Daysuris Vásquez, quien a comienzos de año lo acusó de recibir de un narcotraficante una alta suma de dinero para la campaña del hoy presidente, y de quedarse con ese dinero.
La Fiscalía ha informado en un comunicado que Nicolás Petro Burgos fue detenido "por los delitos de lavado de activos y enriquecimiento ilícito, y Daysuris del Carmen Vásquez Castro por los punibles de lavado de activos y violación de datos personales por hechos ocurridos desde 2022 a la fecha".
Nicolás Petro nació en 1986 en Ciénaga de Oro -pueblo del departamento caribeño de Córdoba de donde también es oriundo el hoy presidente- de la de Gustavo Petro con Katia Burgos en sus tiempos de militante de la guerrilla del Movimiento 19 de Abril (M-19). Pese a que no se crió con su padre, Nicolás Petro heredó de él su afición por la política, y en 2019 fue candidato a la Gobernación del Atlántico y, aunque no fue elegido, obtuvo un escaño en la Asamblea Departamental. Al año siguiente comenzó una relación de pareja con Day Vásquez quien el 7 de agosto de 2022, día de la toma de posesión de Gustavo Petro, apareció en la fotografía de la familia presidencial como esposa del hijo mayor del mandatario.
Otro escándalo antes de cumplir Petro su primer aniversario en el poder
Petro, que cumple el próximo 7 de agosto un año en el poder, ha tenido unos meses convulsos, en los que no han faltado los escándalos, desde un supuesto abuso de poder que le costó el cargo a Laura Sarabia, jefa de Gabinete, y a Armando Sarabia, embajador en Venezuela, hasta una reestructuración de su Gobierno por el estancamiento en el Congreso de sus principales reformas sociales.
El de su hijo ya era un caso que le había acechado, desde que la Fiscalía anunció en marzo que investigaría a Petro Burgos por un "posible lavado de activos" después de que Vásquez contara a la revista 'Semana' que el narcotraficante Samuel Santander Lopesierra, alias "el hombre Marlboro", le dio "más de 600 millones de pesos (unos 153.000 dólares de hoy) para la campaña del papá" que no llegaron a su destino.
En principio, la detención de Petro Burgos, de 37 años, no afecta directamente al mandatario, pero el escándalo puede debilitar aún más su Gobierno, cuando faltan tres meses exactos para las elecciones municipales y regionales de octubre y carece de mayorías legislativas para lograr la aprobación de sus reformas en el Congreso.
Reacciones políticas a la detención
Las reacciones no se han hecho esperar con apoyos al presidente desde el oficialismo y críticas de la oposición, que le echa en cara su supuesta lucha contra la corrupción cuando la tiene en su propia casa. "Le reconozco al señor presidente su ánimo de respetar las instituciones. Sin embargo, (la detención de su hijo) amplía el manto de dudas sobre el posible ingreso de dineros ilícitos a su campaña y la a legitimidad del gobierno. Qué ironía, su gobierno es hoy todo lo que en su momento criticó", ha declarado el senador David Luna, del partido Cambio Radical.
Por su parte, el expresidente Álvaro Uribe, al ser preguntado, por el caso, ha indicado: "Mis padres siempre me enseñaron a jamás alegrarme del dolor o del mal del prójimo". Sin embargo, la tónica general entre expertos juristas y políticos ha sido desmarcar las acciones individuales del primogénito del presidente de su Gobierno, con la confianza de que la justicia resolverá el caso.