El jefe de la Casa del Rey, Jaime Alfonsín, frenó en seco el intento de Corinna Larsen de 'involucrar' al rey Felipe VI en los negocios del rey emérito. En una carta a la que ha tenido acceso 'El Mundo', el 21 de marzo de 2019 Alfonsín respondió a una misiva que los abogados de la empresaria habían mandado a Zarzuela dos semanas antes para tratar de establecer comunicación con la institución.
"Ni su majestad el rey, ni esta Casa, tienen conocimiento, participación o responsabilidad alguna en los presuntos hechos que menciona, por lo que carece de toda justificación lícita su involucración en los mismos", aseguró la Casa Real en la carta que envió a Corinna, y advirtió: "Esta Casa se reserva el ejercicio de las acciones judiciales que considere procedentes frente a insinuaciones y advertencias a su majestad el rey".
De esta forma, Zarzuela rechazó cualquier tipo de dialogó con la empresaria, quien, el 5 de marzo había hecho dos referencias a los reyes para tratar de involucrar a la institución en sus asuntos. En concreto, trataba de involucrar al rey Felipe VI en los negocios de su padre.
Además, Corinna aseguraba en su misiva que Felipe VI y la Princesa Leonor eran el "beneficiarios" de la Fundación Lucum, investigada por ser sospechosa de haber sido entidad pantalla para ocultar 65 millones de euros que el rey Juan Carlos I habría recibido de Arabia Saudí. Asimismo, la empresaria afirmaba que el rey, siendo príncipe de Asturias, en 2011, recibió uno de los Ferraris que Mohammed bin Zayed Al-Nahyan, príncipe de Abu Dhabi, entregó a la monarquía española.
Corinna hacía estas afirmaciones en la misma carta, publicada este viernes por 'El Mundo' en la que informó a la Casa Real en 2019 de que el rey Juan Carlos le había solicitado la devolución de los 65 millones de euros de Arabia Saudí en el año 2014, tras su abdicación, una cantidad que el monarca le transfirió en 2012 a través de la Fundación Lucum.
En esta misiva, además, contó que se negó a hacer esta devolución porque quería "evitar potenciales acusaciones por delitos financieros" y que el rey emérito le acusó "falsamente de haberle robado sus bienes".
La petición de Corinna de iniciar un proceso de diálogo o negociación con la Casa Real en un momento en el que la justicia suiza la investiga por un posible delito de blanqueo de capitales fue interpretada por Zarzuela como una amenaza a la Jefatura del Estado, por lo que rechazó cualquier tipo de negociación con la empresaria: "Ni el rey ni esta casa van a designar representante legal alguno para abrir un canal de comunicación o para iniciar un proceso de discusión o negociación con los hechos que describe".
Días después de que la Casa Real enviase la carta a Corinna, el rey Felipe VI fue a un notario en Madrid para dejar constancia de que no tenía conocimiento de la posible fortuna que su padre pudiera tener en paraísos fiscales, renunció a su herencia en vida y retiró al rey Juan Carlos la asignación que percibía del presupuesto de la Casa Real.
Además, en comunicado hecho público el 15 de marzo, Zarzuela informó de que el rey Felipe VI "no aceptaría participación o beneficio alguno en la Fundación Lucum, renunciando asimismo a cualquier derecho, expectativa o interés que, aún sin su consentimiento o conocimiento, pudiera corresponderles ahora o en el futuro en relación con la entidad".