Todos, en tierra

La Generalitat no activó ninguno de sus seis helicópteros ni durante el día de la DANA ni en las jornadas posteriores

Los detalles
A pesar de no ser aparatos especializados en rescate, estos helicópteros podrían haber transportado víveres a zonas incomunicadas y también transportar equipos sanitarios.

Helicóptero de bomberos de la Generalitat Valenciana
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La Generalitat no activó ninguno de los seis helicópteros de los bomberos forestales de los que dispone durante el día de la DANA. Tanto durante esas horas como en las jornadas posteriores, permanecieron el tierra y no realizaron ningún servicio de emergencia a pesar de contar con el aval de Aviación Civil.

Así informa de ello el periódico 'Levante', que afirma que esos helicópteros se quedaron sin participar en actividad alguna en esos tráficos días. Ni realizaron operaciones de rescate ni dieron apoyo logístico, a pesar de que unidades como la de la base de Siete Aguas podría haber llegado en Utiel en menos de 10 minutos. Sin embargo, no se les movilizó.

Dichos aparatos, a pesar de no ser de rescate, podrían haber resultado útiles para hacer llegar comida a las zonas incomunicadas y transportar también equipos sanitarios o para localizar a posibles personas atrapadas. Sin embargo, nada de nada.

Tampoco los equipos terrestres se desplegaron al completo. De todos los equipos de bomberos forestales disponibles, el Consell sólo activó a seis unidades para trabajar. Cinco de ellas, en Utiel; una, en Chiva. En total disponen de 56 equipos en toda la Comunitat Valenciana.

Además, de los 36 profesionales que se movilizaron, cinco de estos equipos estaban incompletos, con lo que la cifra de personal enviado por la Generalitat se redujo a 30.

Un informe sobre la gestión de la DANA señala a Mazón

Mientras, las conclusiones de un informe de SOS Desaparecidos señalan a Carlos Mazón, president de la Generalitat, quien a su juicio debió declarar el nivel 3 de emergencia nacional. Califican todo como una "manifiesta y bochornosa incompetencia municipal y autonómica".

Además, indican que el Gobierno de la Generalitat Valenciana no supo liderar, alertar ni coordinar, causando por ello pérdidas humanas evitables que se multiplicaron porque los ayuntamientos "no tenían planes ni estrategias de evacuación".

Indican, en ese sentido, la tardía llegada de la alarma de emergencias: "El silencio de las alertas fue la condena para la población, e impidió evacuaciones y movilizaciones de recursos. Un aviso habría salvado vidas".