El Gobierno se ha desmarcado de la postura de Alberto Garzón sobre la ganadería y las macrogranjas señalando que se trata de "una entrevista a título personal".
Así lo ha indicado Pilar Alegría, la ministra de Educación, que ha sido la primera dirigente del Ejecutivo nacional en pronunciarse. En declaraciones en 'Onda Cero' ha dicho que en esa "entrevista no se marca la posición del Gobierno", que ya ha "dejado clara su postura en otras ocasiones".
"Pedro Sánchez ha dicho taxativamente que está favor del sector ganadero y eso se demostró en diciembre con la aprobación de la Política Agrícola Común de la Unión Europea", ha añadido al respecto antes de asegurar que nuestro país es "un gran productor de alimentos de calidad".
Por su parte, la ministra portavoz, Isabel Rodríguez, ha asegurado que para este Gobierno "el sector ganadero es prioritario" y "España no se entiende sin contar con un sector tan importante". Igualmente, ha defendido que "nos ajustamos a todos los estándares de calidad que demanda" Bruselas y nuestro país "emite productos de excelencia".
"La agricultura y la ganadería, como se practican en nuestro país son un elemento de cohesión territorial que garantiza el desarrollo rural, generan empleo y un sostenimiento del paisaje. Es un sector absolutamente prioritario para el Gobierno, que lo demuestra con apoyos", ha argumentado al respecto.
Ya son varios los dirigentes autonómicos, entre ellos dos socialistas, los que han pedido que el titular de Consumo dé explicaciones e, incluso, que dimita. Es el caso de Javier Lambán, presidente de Aragón, que ha dicho en redes sociales que "no puede ser ministro ni un día más" una persona que hace "declaraciones desgraciadas e insensatas" que son "una agresión directa a una parte importante de la economía aragonesa, que se esfuerza por ser competitiva y sostenible".
En la misma línea se ha pronunciado Emiliano García-Page, que ha pedido "una rectificación" ante lo que considera "una propaganda negativa de un sector tan importante en el exterior". "Nuestra carne cumple todos los estándares de control y es de primera calidad", ha apuntado al respecto.
Ambos, al igual que Alfonso Fernández Mañueco, entienden que Garzón en el diario británico 'The Guardian' criticó la calidad de la producción ganadera en España. Pero en realidad, el ministro ha señalado en este medio que "la ganadería extensiva es un medio ambientalmente sostenible y que tiene mucho peso en partes de España como Asturias, partes de Castilla y León, Andalucía y Extremadura".
Sí ha cargado contra las mega-granjas. "Lo que no es en absoluto sostenible son las llamadas mega-granjas. Encuentran un pueblo en una parte despoblada de España y ponen 4.000, 5.000 o 10.000 cabezas de ganado. Contaminan el suelo, contaminan el agua y luego exportan esta carne de mala calidad de estos animales maltratados".
Aun así, se ha visto obligado a dar explicaciones en Twitter, donde ha señalado que se han malinterpretado sus palabras sobre esta polémica: "Lo que dije sobre la ganadería de Castilla y León en la entrevista es un justo elogio de la ganadería extensiva. Pero el señor Mañueco está desesperado por los votos de ultraderecha y por eso recurre a la mentira y manipulación de los lobbies. Ojalá rectifique".
Poco después, el propio Garzón ha aprovechado su anterior mensaje para para "publicar la transcripción completa" de lo que dijo en la entrevista. "Por motivos de espacio, el periodista tuvo que excluir algunos elementos que hoy, al calor del bulo y la mentira que ciertos actores promueven, salen realzados", ha lamentado el ministro.
Fuentes del Ministerio de Cultura han querido dejar claro que "España es un país productor de alimentos de calidad de reconocido prestigio en los mercados internacionales". Defienden así que cuenta con "una gran diversidad agronómica en su territorio, de producción convencional y ecológica, donde también conviven modelos de ganadería intensiva y extensiva, que siguen las estrictas normas de la Unión Europea".
Esta cartera gubernamental también ha señalado que está trabajando para "actualizar la normativa de ordenación de los sectores ganaderos, como ya se ha hecho con el porcino y el avícola, y se hará próximamente con el sector vacuno (carne y leche)". "El objetivo es ir hacia producciones cada vez más sostenibles y apoyar a las explotaciones familiares y profesionales", sentencian.