El Govern de Francina Armengol se fiaba de las empresas que venían recomendadas desde el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana de José Luis Ábalos para la contratación de material sanitario durante la pandemia de coronavirus. Así lo trasladan fuentes del entorno de la presidenta del Congreso de los Diputados, si bien no saben especificar quién era la persona que llamó al Govern para comprar las mascarillas defectuosas que llegaron a través de la trama del 'caso Koldo'.
Armengol, que hasta el momento ha mantenido silencio en lo relativo a las informaciones que la vinculan con el 'caso Koldo', podría pronunciarse este martes y dar explicaciones que, a día de hoy, todavía no se han producido. La principal cuestión que hay en estos momentos es por qué su Govern tardó tres años en reclamar la calidad de las mascarillas defectuosas que recibieron.
Fuentes cercanas al Ejecutivo balear aseguran que hubo varias reclamaciones de manera oral sin éxito y que finalmente se hizo, dentro del plazo, por escrito, algo que haría que ese expediente quedase en manos del PP.
Tras esta duda, cabe preguntarse por qué la actual presidenta de Baleares, Marga Prohens, no reclama y deja expirar el expediente. Aunque Prohens defiende que todavía están a tiempo de continuar, el juez determinó que el plazo expiró el pasado 18 de enero.
El contrato se firmó después de pagar las mascarillas
A finales de abril de 2020, el Govern de Armengol abonó y recibió el material sanitario que habían adquirido, pero no es hasta mayo cuando se adjudica un contrato que podría haber infringido la ley. El subdirector de compras de ese Govern aseguraba que los pedidos llegaron de manera satisfactoria y sin incidencias, algo que no se ajusta a la realidad.
Iago Negueruela, portavoz del PSIB-PSOE en Baleares, ha explicado en 'Al Rojo Vivo' que la firma en un expediente hace que se "constate la recepción del pedido", añadiendo: "Eso no quita que tú puedas hacer una revisión del expediente y reclamar las cantidades".
Dos años más tarde de la compra, la Guardia Civil reclama la documentación sobre ese contrato. Entonces, el Govern obvia que las mascarillas eran de una calidad inferior a la acordada. El portavoz del PP en Baleares, Guillem Sagreras, afirma que se emitió "un certificado falso para que esta empresa pudiese presentarse a concursos en otras administraciones".
Según el PP, esto convierte al caso en el de las mascarillas 'fake', ya que gran parte del material sanitario se quedó en un almacén, algo que los socialistas niegan, alegando que no se trataba de un producto malo, sino diferente al solicitado.