Niega a Mouliáa
De la incongruencia política al Errejón más explícito ante el juez: el vídeo de la declaración del expolítico
Entre líneas Más allá de lo relatado en su declaración el pasado viernes, la grabación de su comparecencia ante el instructor deja imágenes de un Errejón tranquilo y cómodo que a penas se le ve flojear a pesar de las contradicciones.
Con el brazo sobre el banquillo y las piernas cruzadas. Así esperaba Íñigo Errejón a que el juez que le investiga por una presunta agresión sexual a la actriz Elisa Mouliáa le diera la palabra en su declaración del pasado viernes. Se trata de uno de los detalles que más llama la atención tras salir a luz las imágenes de su comparecencia a las que ha accedido este lunes laSexta. Más allá de negar de forma reiterada cualquier falta de consentimiento, el exportavoz de Sumar insiste en que fue "un calentón" en el que ambos participaron ambos "de forma activa".
Mientras que en la primera parte de la declaración, Errejón se limita de forma muy cómoda a rechazar muchos de los puntos relatados por la actriz en su denuncia y después ratificados ante el juez, en cierto momento el cofundador de Podemos empieza a flojear. Eso sí, se recupera rápido. En un momento determinado, el juez Adolfo Carretero le cuestiona sobre las razones que le llevaron a emitir el comunicado en el que anunciaba su marcha de la vida política debido a comportamientos inadecuados, puesto que la denuncia formal de Mouliáa no llegó hasta horas después.
En concreto, Carretero le cuestiona si su salida tiene qué ver con la presunta agresión sexual a la actriz, lo cual niega de forma rotunda Errejón que segundos antes escuchaba el interrogante de un incisivo juez, de pie con las piernas abiertas y las manos atrás. Entonces, se observa que Errejón podría empezar a dudar, pero cuando el instructor le recuerda el testimonio en redes sociales de una chica que habría sufrido un trato similar en un concierto en Castellón, vuelve a ser el Errejón que ostentaba la portavocía de Sumar.
"No, a mi no me ha denunciado nadie más (...) Son testimonios anónimos en redes sociales", profiere el expolítico. Entonces, relata que en ese momento él llevaba "diez años en la primera línea política" de la que aseguraba estar "cansado", de hecho asegura que la idea era dejarla durante la actual legislatura.
Sus planes, sin embargo, se desbarajustan cuando aparece el relato antes mencionado, por lo que admite perder "la confianza" de sus "dirigentes políticas". Por otro lado, señalaba que en el espacio político en el que "militaba" se defendía que "cualquier testimonio aunque sea anónimo y en redes es plena y directamente válido": "Es obvio que no puedo ser portavoz de este espacio político y defender mi inocencia", concluyó Errejón.
Si bien, este no es el único fragmento llamativo de su declaración del pasado viernes. Muy avanzada la comparecencia era el turno de las preguntas de la Fiscalía, que en un primer momento, le cuestiona sobre el tipo de conversación que había mantenido con la Elisa Mouliáa antes de encontrarse de forma física aquella noche de septiembre de 2021. El expolítico responde que con el tiempo esas charlas ya habían "subido de tono" tras un "tonteo" inicial, sin detallar mucho más sobre el contenido.
Ante ello, el juez le pide que no sea "tan metafórico" para ser más concreto, pues es necesario en un proceso penal como este conocer "el grado de intimidad" que tenía con la denunciante. Entonces, Errejón, a pesar del "rubor" que le dice dar esa situación, admite que "sí": "Básicamente, hablábamos de cómo ibas a follar con la otra persona".
Un extremo que sustentaría su defensa basada en alegar que todo fue consentido -"rotundamente"- por parte de la actriz. En definitiva, las diferencias en las declaraciones ante el juez el pasado viernes son claras. Mientras que el expolítico niega cualquier falta de consentimiento por parte de Mouliáa, esta sostiene lo relatado en su denuncia ante la Policía Nacional.