Isa Serra se ha reafirmado en el juicio en el que ha tenido que declarar como acusada de desórdenes públicos y atentado contra la autoridad en un desahucio en 2014. Ha asegurado que no tiró "ningún tipo de objeto a los agentes y que se alejó de la protesta cuando comenzaron las cargas porque tenía "miedo de la situación".
Durante su declaración, tras ser informada de los hechos, la portavoz de Unidas Podemos en la Asamblea de Madrid ha asegurado que el día de los hechos, el 31 de enero de 2014, se encontró con un desahucio cuando regresaba a su casa de la universidad hacia las 11:30 horas.
"Había cerca de unas 60 personas, algunos sentados y otros de pie. La situación estaba tranquila. Al poco después, la gente comenzó a hacer cánticos tipo 'no vamos a parar'. La Policía empezó a levantar a la gente sentada y empieza a empujar a la gente que estaba de pie", ha señalado.
Asegura que se alejó porque "tenía miedo" y no lanzó objetos a los agentes
Así mismo, tras las preguntas de la fiscal, ha indicado que los concentrados insultaron a la Policía cuando comenzaron las cargas y ha asegurado que no conocía a la persona que iba a ser desahuciada ni pertenecía plataforma en la Plataforma Stop Desahucios.
En cuanto a la declaración de los agentes, que la han reconocido como una de las instigadoras, ha apuntado que "esos hechos son falsos y en ningún momento" se dirigió a ellos. "Yo me alejé porque tenía miedo de la situación, ni estuve donde se lanzaban objetos ni tiré objetos", ha asegurado, subrayando que en ningún momento se sentó junto al resto de personas concentradas.
"Yo la vi en los dos puntos y dando instrucciones mientras hablaba por teléfono. Esta persona prosiguió con los insultos e, incluso, lanzó objetos", ha asegurado un policía municipal, mientras que otra agente la ha reconocido como la "persona que se ensañó" con ella.
La vista del juicio se ha celebrado en la Sala de los Civil y Penal del Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM). La fiscal solicita una pena de prisión de 23 meses y una indemnización de 5.200 euros por proferir insultos y lanzar objetos a los agentes, llegando a llamar a una policía "cocainómana" y "mala madre".