Laporta se desmarca de la denuncia por estafa de una familia que ganó la Primitiva

El presidente del FC Barcelona, Joan Laporta, ha negado tener relación con el presunto delito de estafa de 4,7 millones de euros del que le acusa una familia que invirtió parte del premio de la Primitiva que ganó en 2014 a través de la sociedad CSSB Limited con la que Laporta estaba vinculado.

A su salida del juzgado, Laporta no ha contestado a las preguntas de los periodistas referidas a este caso, pero sí que ha criticado el arbitraje que sufrió el Barcelona en su partido contra el Getafe. "¡Una vergüenza! Que no se pitara el penalti a Koundé. ¡Es un escándalo!", ha asegurado.

Esta familia decidió adquirir un coche de alta gama y el comercial del concesionario les propuso invertir en sociedades vinculadas al presidente del Barça. Los querellantes denuncian que contaron con el asesoramiento de Laporta, que incluso les invitó al palco del Camp Nou. Aseguran que el presidente del Barça se aprovechó de su falta de conocimientos financieros y que el contrato que firmaron era en inglés. Finalmente, perdieron todo el dinero.

Denuncian también cláusulas abusivas, como que solo podían reclamar las pérdidas en tribunales de Hong Kong. La defensa de Laporta lo atribuye a una estrategia para desprestigiar al presidente del Barça.

"Nunca los había visto antes, ni era su abogado", ha asegurado Jordi Pujante, el representante legal de Laporta, que ha añadido: "Por lo que él sabe y él conoce, han habido distintos inversores en proyectos empresariales que no han ido de la manera satisfactoria que todos hubiesen querido".

Joan Comas, abogado de la parte querellante, ha señalado que Joan Laporta "conocía ciertos asuntos vinculados con el caso" y que "mantenía contacto" con su cliente, quien "acudía a su despacho cuando lo consideraba necesario" para tratar temas bancarios relacionados con el premio de lotería.