En materia verde para la lucha contra el cambio climático, hay tres partidos políticos que avanzan en una dirección, con mayor o menor ambición, y otro que va aparte. No es una opinión, sino una idea en la que coinciden los expertos, tras desglosar los programas electorales de PP, PSOE, Sumar y Vox; los cuatro principales partidos políticos para estos comicios.

Economía verde

"Es el único partido que, de forma completamente, disonante, niega la acción del ser humano en el cambio climático", asegura Marcial González, Investigador del Departamento de Energía Eléctrica en la UC3M. Se llega a preguntar incluso, cuáles son los argumentos que esos enarbolan para negar su existencia, más "creencia", dice, que ciencia. Irónicamente, ellos mismos tachan el cambio climático de "religión climática" en su programa electoral.

Entre sus medidas, además, propone reabrir las centrales térmicas y construir mini reactores nucleares (SMR) en las centrales ya cerradas. Un proceso, para González, "económicamente muy costoso" y que no compensa.

Sobre esta fuente de energía, el Partido Popular, en el punto 114 de su programa electoral, propone "la extensión de la vida útil de las centrales nucleares existentes", siempre sí o sí, con el visto bueno del Consejo de Seguridad Nuclear. A este respecto, Marcial González asegura que le faltaría por saber "los datos de cómo quieren hacer la ampliación" de esa vida útil de la nuclear. Asimismo, también propone eliminar "las medidas existentes de intervención del mercado eléctrico".

PSOE y Sumar implantan sus propuestas sobre la base ya aprobadas durante esta legislatura, a través de una política de empleo y económica que prácticamente gira en torno a esa transición verde. Para ellos, la apuesta de España por las energías renovables podría convertir el país en un "hub industrial" a la cabeza de Europa en esta transformación. En este sentido, sus programas prevén la creación de entre 500.000 (Sumar) y 700.000 (PSOE) puestos de trabajo verdes. Para los expertos, "un plan de máximos" que, eso sí, va a requerir mucho tiempo.

Vivienda

En lo que respecta a la vivienda, todos los partidos coinciden en que es uno de los principales problemas del país. Abogan, por tanto, por encontrar una solución para la próxima legislatura. Y sorpresa: a pesar de la bronca política, todos también coinciden en que la construcción de vivienda social es la solución a este reto.

Sumar propone invertir sostenidamente durante 10 años, "el 1% del PIB en construcción, compra y movilización de vivienda" para generar un parque para alquiler social de más de 2 millones de viviendas. Asimismo, apuestan por volver a implantar un tope al alquiler en zonas tensionadas, así como ayudas directas a las personas hipotecadas con un interés variable. Para Elena Gutiérrez, Cofundadora de 'Colibid', se trata de una medida que "requiere de un lapso de tiempo muy considerable, al margen de que estaría comprometiendo muchísimo dinero" a este plan de acción.

El PSOE coincide con ellos en el fondo, pero no en la forma. Tal y como aseguró el candidato socialista a la Presidencia del Gobierno en Al Rojo Vivo, existe "un punto de partida muy interesante" entre ambos partidos. Sin embargo, sus medidas pasan por apostar al 100% por la recién aprobada ley de Vivienda. Gutiérrez recuerda a este respecto, la apuesta de esta legislación por aumentar el parque de vivienda social a través de, entre otras cosas, la oferta de la Sareb (el mal llamado, banco malo): "hay mucha diferencia entre las viviendas de la Sareb, respecto a las 183.000 que pretende facilitar el PSOE", asegura, sentenciando que es una propuesta, cuanto menos, "ambiciosa".

PP y Vox comparten una máxima a este respecto, que pasa por derogar completamente la ley. A pesar de esto, Elena Gutiérrez reconoce que, a pesar de "estar lejos de ser perfecta", es una ley que "ha hecho grandes avances en materia de vivienda" y les recuerda que "muchas de las iniciativas que ha promovido se encuentran entre las propuestas de esos partidos políticos". Los populares también abogan por aplicar el programa de avales a jóvenes de hasta 35 años para la compra de una vivienda, mientras que Vox dedica casi un tercio de sus medidas en vivienda, a defenderlas de la ocupación ilegal.