En Valencia
Salomé Pradas rompe a llorar ante la jueza de la DANA y admite que "no tenía experiencia ni conocimientos en emergencias"
El contexto La exconsellera de Interior de la Generalitat Valenciana se ha exculpado de toda responsabilidad en su declaración este viernes como investigada ante la jueza Nuria Tobarra que investiga la gestión de la DANA, junto al que era su número 2, Emilio Argüeso.

La presión del momento ha podido con Salomé Pradas, que ha roto a llorar en varios momentos al declarar como investigada ante la jueza que investiga la gestión de la DANA. La exconsellera de Interior de la Generalitat Valenciana ha repartido las culpas por la nefasta gestión en la tarde de la tragedia y ha consumado la estrategia de acusar a todos con tal de salvar al president, Carlos Mazón.
La de Salomé Pradas es la primera declaración de un investigado en esta causa penal, y seguirá a partir de las 12:30 horas de este mismo viernes la de su número 2, el exsecretario autonómico Emilio Argüeso.
Pradas, que ha respondido únicamente a las preguntas que está formulando su letrado, Eduardo de Urbano, había planteado una defensa al ataque que ha ignorado los abrumadores indicios que existen en la causa y que señalan al Govern. Tal y como estaba previsto, la exconsellera, a quien Mazón destituyó el pasado 20 de noviembre, ha repartido las culpas entre todas las administraciones, central, autonómica y local, según fuentes presentes en la declaración.
A los largo de las dos horas y 45 minutos que ha durado la declaración, la exconsellera de Mazón se ha exculpado de la gestión, argumentando que ella "no dirigía nada", acababa de llegar al cargo y que "no tenía experiencia ni conocimientos en emergencias". Se limpia Pradas de responsabilidad la que era, el día de la riada, quien tenía máxima autoridad para tomar la decisión de proteger a la población. Precisamente, la jueza la había citado por ser "necesaria" su declaración dada su "relevancia orgánica y, por ende, decisoria" -más aún ante la ausencia manifiesta de Mazón-. Pero Pradas, por lo que declara, ni decidía, ni sabía. Es más, ha llegado a decir que su cargo era "institucional".
Se exculpa, y reparte hacia todos lados (pero más hacia el Gobierno central)
Pradas ha ido repartiendo hacia todos lados menos hacia arriba: Pradas ha insistido ante la jueza que la dirección del Centro de Coordinación Operativa Integrado (Cecopi) era "colegiada" con la delegada del Gobierno, Pilar Bernabé. En su discurso exculpatorio, la exconsellera ha mirado hacia abajo, señalando igualmente que en el Cecopi había "muchos técnicos" con "mucha experiencia". A ellos les ha atribuído toda la responsabilidad del texto de la alerta Es-alert y su envío, algo que señaló la jueza de Catarroja por haber llegar tarde y con un mensaje erróneo. No esperó a Mazón para enviarla, dice, no se retrasó por esperarle. Si la alerta llegó a las 20:11, mientras muchas personas morían ahogadas, es, para esta política del PP, por culpa de los técnicos del Cecopi.
Asimismo, la exconsellera ha esbozado que el sistema Es-alert no estaba implementado en los planes de emergencia de la Generalitat, algo que ya se demostró que era falso.
Por supuesto, y siguiendo el argumentario de la Generalitat mantenido hasta ahora, no podía faltar la acusación a la Confederación Hidrográfica del Jucar, de la que dice que no avisó de la crecida de la Rambla del Poyo. Según Pradas, que ha dicho que la actuación de la CHJ fue "negligente y ausente", afirma que no estuvieron "informados de la magnitud hasta final del día", cuando los destrozos se retransmitieron por todos los medios de comunicación desde primera hora de la tarde.
En esta lista interminable de culpables de la nefasta gestión, salvo ella y Mazón, se encuentra también Pilar Bernabé, delegada del Gobierno en Valencia, a quien ha señalado por no hablar llamado entre las cinco y las siete de la tarde: "Fui yo quien la llamé cuando me dijeron que quedaban dos horas para que se rompiera la presa de Forata", ha apuntado. Otro que recibido señalamiento de la exconsellera ha sido el inspector jefe del Consorcio Provincial de Bomberos de Valencia en el momento de la dana, José Miguel Basset.
Al comienzo de la sesión, las defensas de Pradas y Argüeso han intentado que no se grabaran las declaraciones y que se reflejen por escrito, pero la jueza, Nuria Ruiz, no ha comprado el intento, argumentando que todas las sesiones de esta causa se están grabando. Sin embargo, ha aceptado que la grabación solo se ceda a las partes.
Llamó a Mazón
Eu su declaración, cuentas las fuentes presentes, Salomé Pradas ha presentado a la jueza un listado de más de 100 llamadas. Entre ellas, dice, afirma que llamó al propio Mazón por la tarde en varias ocasiones, si bien no ha llegado a especificar si el president, que estuvo ausente toda la tarde y que no llegó al Cecopi, según dijo él, hasta las 20:28, le cogió la llamada.
Sí se extrae de su declaración cierta implicación de Mazón cuando ha asegurado que Presidencia ya le pidió a Pradas un informe de situación durante el Pleno del Consell, que tuvo lugar en la mañana del 29 de octubre.
Argüeso defiende a Mazón
Tras la declaración de Pradas, ha sido el turno para el que fuera su número dos en esa catástrofe, Emilio Argüeso. Al igual que su exjefa, se ha exculpado de toda responsabilidad. También ha defendido al presidente de la Generalitat Valenciana, Carlos Mazón, asegurando que no estaba convocado al Centro de Coordinación Operativa Integrado (Cecopi) "no tenía por qué ir": "Aunque hubiera ido", ha agregado que "la dirección la llevaban Salomé Pradas" y la delegada del Gobierno en la Comunitat, "Pilar Bernabé".
En su defensa ha dicho que como no le hacían caso por los rescates que le pedían, se enfadó y se fue al '112', donde "salvó muchas vidas". El investigado ha cargado igualmente contra José Miguel Basset, el exjefe de Bomberos, a quien señalado por no avisar, dice, de que los bomberos forestales fueron retirados del barranco del Poyo.
Además, Argüeso ha manifestado que el subdirector general de Emergencias, Jorge Suárez, estaba de vacaciones del 22 al 29 de octubre y que su sustituta lo avisó para que volviera a su puesto de trabajo con la dana. Argüeso ordenó a Suárez declarar el nivel 2 de Emergencia a las 15:00 horas y convocar el Cecopi, un hecho que no se produjo hasta alrededor de las cinco de la tarde, ha señalado, según recoge EFE.
Llegada entre gritos
La tensión de esta sesión ha sido manifiesta desde su llegada a la sede judicial este viernes, donde la exconsellera de Interior se ha encontrado con una marabunta de periodistas, preguntas incómodas e insultos de una sociedad valenciana.
Salomé Pradas y Emilio Argüeso se hacían hueco entre ciudadanos indignados que les han recibido entre gritos de "asesinos", "hijos de puta" y "cabrones", multitud presidida por una pancarta en la que se leía "Mazón criminal". A la protesta han sumado el sonido de la Es-alert a todo volumen.
Con esta citación, la jueza Nuria Ruiz Tobarra mira directamente al Gobierno de Carlos Mazón para encontrar responsabilidades por los 228 homicidios por imprudencia y los centenares de lesiones que está investigando. Tan es así, que ha rechazado por dos veces la declaración como testigo del todavía 'president' de la Generalitat con el argumento de que, si finalmente se anima a declarar voluntariamente, como le ha ofrecido en repetidas ocasiones, solo podrá hacerlo con la condición de investigado.
En el auto de citación como investigados, la jueza afirmaba que el aviso a la población por el sistema Es-Alert a las 20:11 horas del 29 de octubre "fue tardío y erróneo".