El Paseo de la Castellana de Madrid ha quedado sobre las 10.15 horas de este lunes despejado de los taxistas que acampaban en la zona desde el domingo, tras casi tres horas de desalojo por parte de la Policía Nacional y del trabajo de las grúas municipales, que se han llevado los vehículos que no han sido retirados por sus dueños de forma voluntaria.
Entre las 7.00 y las 8.00 horas de este lunes, las primeras grúas han empezado a llevarse los taxis que estaban estacionados en los laterales del paseo de la Castellana, a la altura de la plaza de Emilio Castelar. Allí también la Policía Municipal de Madrid ha empezado a multar a los taxistas.
Posteriormente, se han vivido momentos de tensión y forcejeo cuando la Policía Nacional ha tratado de dispersar los carriles centrales y los taxistas concentrados se han sentado delante de los vehículos para impedir ser desalojados.
Finalmente, han conseguido ir dejando libre el tramo de la Castellana entre plaza de Colón y Gregorio Marañón. Sólo ha permanecido la tienda de campaña de los taxistas que cumplen este lunes su cuarto día de huelga de hambre.