El agente de 50 años estaba destinado en Zarauz, Guipúzcoa, aunque había nacido en Don Benito, donde viajaba con frecuencia para disfrutar de sus días de descanso.
Esta madrugada se encontraba en una zona de ocio de la Plaza de España cuando intervino para mediar en una reyerta y se identificó como guardia civil para "intentar calmar los ánimos", según ha explicado uno de los portavoces policiales.
Al parecer, la pelea se inició dentro de un local aunque fue en el exterior donde se produjeron los hechos. El cadáver del agente ha sido trasladado al Instituto de Medicina Legal de Badajoz, donde se le está practicando la autopsia.
Ahora, los agentes han detenido a cuatro personas vinculadas con el asesinato, según ha informado la Delegación del Gobierno.