El Ayuntamiento de València decretaron este martes bandera roja en las playas del Saler, Arbre del Gos y Garrofera por la aparición de un vertido. Este jueves se han reabierto al público, pero lo han hecho con bandera roja, que prohíbe el baño.
El vertido detectado el martes obligó a cerrar estas tres playas del sur de la ciudad mientras se llevaban a cabo los trabajos de recogida del combustible, que finalizaron este miércoles por la tarde. Esta mañana se ha procedido a la retirada de los sacos donde se habían colocado los residuos y a repasar la zona por si quedaba algún resto.
Las primeras llamadas del avistamiento de la mancha se recibieron el martes por parte de testigos que se pusieron con contacto con el teléfono 112, y el Centro de Emergencias activó el Plan Territorial de Emergencias para activar los recursos necesarios.
Cuándo abrirán su baño
Según han informado fuentes del Ayuntamiento de Valencia, hasta que no disponga del resultado definitivo de los análisis del agua no se permitirá el baño en estas tres playas: El Saler, l'Arbre del Gos y la Garrofera.
La contaminación por el vertido afecta a la arena de las mismas pero no al agua del mar, según los técnicos que han constatado que los restos han llegado prácticamente en su totalidad a la costa, donde equipos de limpieza se afanan en retirar la mancha.
Según las últimas revisiones efectuadas por Salvamento Marítimo, la mancha no se ve en el mar, si bien podrían seguir llegando a la costa algunos restos de forma diseminada, ha informado la delegada del Gobierno en la Comunitat Valenciana, Pilar Bernabé.
No obstante se va a continuar analizando y vigilando la situación mientras se certifica con exactitud el tipo de sustancia. "Podríamos decir que puede ser combustible, pero vamos a esperar a lo que determinen los análisis", ha precisado Bernabé.
No procede de barcos de la zona
La Autoridad Portuaria de Valencia (APV) ha asegurado que el vertido de hidrocarburos no procede de ningún barco de la zona de fondeo del puerto, que se sitúa enfrente de esas playas. La APV ha informado de que este martes, cuando se conoció la presencia del vertido, se puso a disposición de Capitanía Marítima por si necesitaba barreras anticontaminación, pero ha señalado que no tiene competencias sobre costas ni tampoco sobre playas, por lo que no ha iniciado actuaciones con motivo del vertido aunque sí ha garantizado que el vertido no procede de la zona de fondeo.
Investigación abierta
El vertido, de 2 kilómetros de longitud y dos metros de ancho, llegó a las playas, donde equipos de limpieza están recogiendo la arena contaminada de manera manual. Todavía quedan restos por recoger y la delegada del Gobierno ha pedido prudencia a los ciudadanos porque se ha visto a bañistas en la zona. "Por favor, que cumplan las normas, con las indicaciones de la Guardia Civil y Policía Local que advierten a las personas de que no se acerquen a las playas", ha dicho dirigiéndose a posibles bañistas y a "observadores", puesto que se debe facilitar la labor de quienes están trabajando en la recogida y de las fuerzas y cuerpos de seguridad que están vigilando y protegiendo a las personas.
En las tres playas cerradas al público se ha colocado la bandera roja, según fuentes municipales. Varias líneas de investigación sobre la procedencia Capitanía Marítima investiga el origen y la causa del vertido de hidrocarburos y mantiene abiertas varias líneas de investigación. En colaboración con la Autoridad Portuaria, se están revisando todos los buques que han salido del Puerto de Valencia y han pasado por la zona afectada, y algunos de ellos ya se pueden descartar, así como los barcos que están en la zona portuaria, y el puerto alertaría en caso de detectar manchas, ha dicho la delegada.
La coordinación es "total" y "todos los medios de la Capitanía Marítima y de Salvamento Marítimo están en ello y por supuesto vigilando e investigando toda la zona para comprobar que efectivamente ya no hay más contaminación en el mar", ha insistido para añadir que el Gobierno de España, a través de Capitanía Marítima y Salvamento Marítimo, la Guardia Civil, la Generalitat Valenciana y el Ayuntamiento de Valencia están trabajando de forma coordinada.