Sólo tres meses después de la desaparición de Diana, 'El Chicle' se convirtió en el principal sospechoso para los agentes, un año después, en noviembre de 2017 no tenían dudas. Pero faltaban pruebas. "'El Chicle' se lleva a Diana en su vehículo", ha asegurado Manuel Sánchez, comandante de la UCO.
A pesar de lo complicado de la investigación, 'El Chicle' siempre estuvo en el punto de mira policial por dos motivos. El desbloqueo del móvil de Diana, en julio de 2017 permite a los investigadores situar en el mismo lugar y a la misma su teléfono y el del sospechoso.
Tras analizar más de 40 cámaras de seguridad, los agentes consiguen identificar el coche de Abuín en el puente de Taragoña. "Es compatible que ambos teléfonos estén juntos", añade Sánchez.
En noviembre de 2016 ocurre algo llamativo, el propio 'Chicle', que cuenta con un amplio historial delictivo, llama a la Guardia Civil y queda con un agente para saber si le están siguiendo. "'El Chicle' se mosquea, cree que le están siguiendo y quiere saber por qué", destaca Sánchez.
'El Chicle' comete un error, asegura que esa noche estuvo en las fiestas de A Pobra, algo que no menciona cuando días después es llamado a declarar como testigo. Su mujer le proporciona la coartada perfecta: esa noche salieron juntos a robar gasolina. Los agentes piden analizar su móvil que él entrega completamente reseteado. También su coche, en el que no encuentran nada.
En el primer aniversario de la desaparición de Diana, más de 100 agentes participan en una reconstrucción de lo ocurrido y la Guardia Civil hace un importante hallazgo. Sánchez afirma que "la red de teléfono estaba tan saturada que el escenario real no fue el que se había tenido en cuenta".
Eso explica que los repetidores captasen al chicle y a Diana abandonando el municipio por salidas diferentes. El día de Navidad 'El Chicle' intenta secuestrar a otra joven en Boiro. Eso precipita su detención casi 500 días después de la desaparición de Diana.