Con total tranquilidad, Sira cuenta cómo presuntamente mató a su novio: "Empezamos a discutir y él me empujó contra el ropero...". También explica cómo guardó el cuerpo en un bidón: "Las manos las tenia tiesas, pero el cuerpo tampoco estaba rígido".

Lo cerró con cinta aislante y lo dejó en su vivienda en Telde, Canarias. Casi tres meses permaneció con el cuerpo allí hasta que, dice, con la ayuda de una amiga, Vicenta, se deshizo del cadáver. "Le puso una manta, porque se sorprendió, le dio impresión y le puso una manta por encima del cuerpo", explica la mujer.

Según su relato, su amiga y ella lo trasladan primero a la azotea del edificio de Vicenta, luego a casa de su padre y finalmente se lo llevan al mar. "Yo paré aquí cuando vi a una clienta pasando y me paré un poquito para hablar", cuenta la amiga de camino al punto en el que deshicieron del cuerpo.

Allí esperan a que se haga de noche y lo lanzan de una patada. Al día siguiente,encontraron su cuerpo en la playa de los Nidillos, pero Sira no fue detenida hasta seis meses después en Asturianas.

La fiscalía pide ahora para ella 19 años de cárcel.