La Guardia Civil ha detenido a un hombre tras asesinar a su expareja en Buñol y protagonizar una persecución policial hasta que ha chocado su coche contra los vehículos policiales que le cerraban el paso en una de las entradas a Valencia, a 40 kilómetros de la casa donde habría matado a cuchilladas y golpes a la víctima este sábado por la mañana.
Después, el ahora detenido, Raúl, de unos 50 años, habría llamado a su exmujer para confesarle el crimen. Fue ella quien dio la voz de alarma, pero, aunque los servicios sanitarios se desplazaron hasta la vivienda, no pudieron salvarle la vida a Juliana, de 31 años, que ya le había denunciado por malos tratos en noviembre del año pasado y estaba en el programa Viogén, aunque no había medidas judiciales activas contra su agresor.
Según el relato de uno de los vecinos, "se supone que tenía ya una orden de alejamiento de la anterior mujer". "Estaba divorciado o separado y le puso una orden de alejamiento", relata. De acuerdo con los vecinos, tenía denuncias de esta pareja anterior, a quien precisamente podría haber confesado el crimen. Así lo ha indicado el teniente de alcalde de Buñol, Sergio Galarza, que ha explicado que "seguramente ha llamado a la exmujer para decir lo que había ocurrido y ella es la que ha dado el aviso a la Guardia Civil".
Posteriormente, en su huida el presunto asesino ha embestido a los vehículos de la Guardia Civil que le han interceptado en la autovía A-3, a la entrada a Valencia, y dos agentes han resultado heridos y han tenido que ser trasladados al hospital como consecuencia del siniestro.
El Ayuntamiento de Buñol ha decretado tres días de luto, ha suspendido todos los actos previstos para este fin de semana y ha convocado un minuto de silencio este domingo como muestra de repulsa y condena ante este crimen, cuya naturaleza machista investiga ahora la Delegación del Gobierno contra la Violencia de Género: de confirmarse, serían ya 22 mujeres asesinadas por sus parejas o exparejas en lo que va de año.