Terapias homófobas

Tres investigaciones estrechan el cerco contra los centros que albergan terapias de conversión para adolescentes LGTBI en Valencia

¿Por qué es importante? La Fiscalía de Valencia ha abierto diligencias contra un profesor y la Fundación de Colegios Diocesanos San Vicente Mártir, mientras que el Ministerio de Igualdad investiga a las archidiócesis por incumplimiento de las leyes LGTBI que prohíben expresamente estar terapias.

TERAPIAS

Dos investigaciones penales y una administrativa estrechan el cerco a las organizaciones que practican las llamadas terapias de conversión dirigidas a modificar la orientación sexual de las personas LGTBI en Valencia.

La Fiscalía Provincial de Valencia ha incoado diligencias de investigación penal tras recibir una denuncia presentada por Compromís contra la Fundación San Vicente Mártir de Colegios Diocesanos.

La formación valenciana asegura que esta organización daba cursos a profesores "en el ámbito de influencia de la fundación, en los que se transmite una imagen patologizante e indigna de la homosexualidad". El objetivo de estos cursos era "permitir a los homosexuales recuperar su masculinidad o feminidad heterosexual natural".

Previamente, la Fiscalía abrió otra investigación por prácticas similares contra Federico Mulet, profesor del centro Madre Josefa Campos de Alaquás. Una inspección de la Conselleria de Educación a raíz de una denuncia de varios alumnos de Educación Secundaria destapó los hechos y varios de los estudiantes aseguraron que habían sufrido la discriminación de este profesor.

La tercera investigación, llevada a cabo por el Ministerio de Igualdad, ha provocado la apertura de un expediente sancionador tras una denuncia presentada por la Asociación contra las Terapias de Conversión contra siete diócesis españolas que acogen este tipo de prácticas.

La asociación denuncia la "comisión activa" y la omisión de infracciones administrativas "muy graves" de la Ley Trans, que persigue activamente "la promoción o la práctica" de estos métodos independientemente del consentimiento que pudieran haber dado los receptores de la terapia.

Javier Martínez fue víctima de las terapias de reconversión de una de las organizaciones que ahora están siendo investigadas. Relata el impacto que estos actos tuvieron en él: "Para ellos la homosexualidad es patológica, decidieron internarme seis meses para sanar mis heridas, mi homosexualidad". Explica que estas terapias llevan a quienes las sufren a un sufrimiento extremo: "Tienes dos caminos, uno es reprimirte toda tu vida y el otro es suicidarte".

Él logró salir tras cuatro años y medio en el que su tratamiento llegó a ser químico. "Te dan antidepresivos, inhibidores de la líbido, algo que te tenga apagado el apetito sexual", cuenta. Ahora, con estas tres investigaciones, se busca que ningún otro joven vuelva a vivir el calvario que atravesó Javier.