Eva lo tiene claro. Algo esconde aquella foto de La Tomatina de 2010. Su primo la encontró en una revista de avión durante un vuelo a México desde España y en aquel momento sólo pensó en que era la propia Eva -su prima- quien había viajado a Buñol para disfrutar de la mítica fiesta de finales de agosto. "Qué calladito se lo tiene, ha ido a La Tomatina y no nos ha dicho nada", relata Casado en Facebook parafraseando los teóricos pensamientos de su primo en aquel avión a México.
Después se lo contó: habían usado su foto de La Tomatina para ilustrar uno de esos reportajes de habitual lectura a bordo de un avión. Eva rio y entendió que todo era una broma. Ella nunca había estado en La Tomatina y no se fiaba de la palabra de su primo. No sería para tanto. Pero su opinión cambió al ver la fotografía de una chica que "parecía su otro yo en un mundo paralelo".
Al principio pensó en la casualidad que factores como el color o la luz podían aportar a la fotografía y trató de quitarle hierro al asunto, aunque admite que "el parecido daba escalofríos". Como fotógrafa profesional, no tardó en intentar resolver sus dudas haciéndose una foto bajo las mismas condiciones de luz: el resultado le inquietó aún más y le llevó a investigar sobre su pasado y el por qué de una imagen con una chica tan calcada a ella.
A partir de ahí entra en escena uno de esos capítulos oscuros de la historia reciente de España: los niños robados. Eva descubrió que en el hospital donde nació se registraron robos de recién nacidos coincidiendo con los teóricos casos de tráfico de bebés orquestados por una red que operaba entre Madrid y Valencia: robaban niños en Madrid para llevarlos después a Valencia.
Además, sus dudas se alimentaron aún más cuando cayó en que su madre nació en un parto de gemelos, con lo que el factor genético también contribuyó a acrecentar su curiosidad por aquella chica de la fotografía en La Tomatina.
'Sólo busco quitarme la espina de la incertidumbre que me recuerda todos los últimos miércoles de agosto de cada año que aún no he encontrado la respuesta a este curioso rompecabezas'
No tardó en preguntar a su madre por su nacimiento pero ella asegura que "no estuvo dormida durante el parto y le parecía muy raro" lo que le decía. Su reacción no fue la misma cuando las palabras "bebés robados" salieron de la boca de Eva. Ella misma reconoce que los ojos de su madre cambiaron al instante: "Vi asomar un brillo en sus ojos que se me quedó clavado en el corazón".
Eva se dio de frente con el muro del silencio en torno a los bebés robados. El hospital en el que nació cerró y poco pudo averiguar sobre una posible gemela a la que hubieran separado de su hermana nada más nacer.
Pese a los indicios y lo inquietante de la fotografía, la protagonista de esta historia se muestra cauta. "Quizá es todo fruto de la casualidad y simplemente la genética ha querido jugar a hacer unas dobles tan similares que podrían pasar por gemelas", apunta Eva en su última llamada de ayuda publicada en Facebook en busca de la chica de La Tomatina de 2010.
Eva insiste en que su objetivo no es otro que aclarar si se trata de una simple coincidencia o si realmente esa foto de revista de avión esconde algo más allá de cualquier casualidad estética: "Sólo busco quitarme la espina de la incertidumbre que me recuerda todos los últimos miércoles de agosto de cada año que aún no he encontrado la respuesta a este curioso rompecabezas".