Más de 3 millones de personas
Los mayores de 40 años también tienen ayudas de vivienda: estas son las opciones
En un limbo En España, las ayudas de vivienda se enfocan en los jóvenes, dejando desprotegidos a mayores de 40 años que alquilan o desean comprar. Las ayudas para compra están restringidas a viviendas protegidas o rurales y suelen requerir hijos a cargo.
En España, las ayudas de vivienda se centran principalmente en los jóvenes, dejando a una parte importante de la población sin muchas alternativas. Más de 3 millones de personas mayores de 40 años viven de alquiler y enfrentan un futuro incierto, con tensiones relacionadas con su capacidad de acceder a vivienda digna. A pesar de las políticas de vivienda impulsadas tanto por el PSOE como por el PP, las opciones para este grupo de edad siguen siendo limitadas.
Las ayudas para los mayores de 40 años están dirigidas principalmente a quienes tienen rentas bajas. Los requisitos generales estipulan que los ingresos anuales deben ser inferiores a 25.000 euros para poder acceder a ayudas que cubren hasta el 40% del alquiler.
En el caso de los mayores de 65 años, este umbral puede llegar hasta los 700.000 euros, y existen programas adicionales dirigidos a quienes tienen pensiones no contributivas, como los del IMSERSO.
¿Qué opciones hay para comprar?
Para aquellos que buscan comprar una vivienda, las ayudas son aún más restrictivas. Las opciones disponibles se limitan a viviendas de protección oficial o a aquellas situadas en zonas rurales. Además, los solicitantes deben tener menores a cargo para acceder a ciertos beneficios.
En el caso de solteros de 50 años que deseen comprar en una ciudad, no existe ninguna ayuda específica, lo que deja a muchas personas fuera de este apoyo.
¿Y qué pasa con las hipotecas?
Por otro lado, el acceso a hipotecas para mayores de 40 años también presenta desafíos. La posibilidad de obtener una hipoteca depende de la suma de la edad del solicitante y el plazo del crédito.
Por ejemplo, una persona de 50 años no podrá solicitar una hipoteca a 30 años, ya que la duración total de la misma no debe exceder los 70 o 75 años, según la entidad financiera. Esto significa que las personas de más de 40 años deberán contar con un respaldo económico considerable para poder acceder a este tipo de financiación.