Pesadilla en la cocina viaja a Valencia para acudir a la llamada de auxilio de los San Filippo, una familia siciliana de tradición hostelera que a pesar de haber tenido éxito profesional en el pasado hoy vive una situación cada vez más desesperada. Los clientes no entran y los que entran no vuelven.
Debido a la mala marcha del restaurante, la madre y el hijo mayor decidieron darle un giro a su cocina y hacer fusión italiano-española. El resultado: platos sin identidad, patatas bravas que no pican, paella con aroma a pesto espaguetis con nata cortada o calamares aderezados con tinta de calamar que puede resultar tóxica.
Además, el carácter del hijo mayor no ayuda a que el restaurante pueda remontar. Su inexperiencia y su afán de mandar por encima de sus padres en el negocio hace que la situación cada vez sea más crítica. Alberto Chicote tiene que colmarse de paciencia.
Pérdidas de 4.000 euros en invierno
La propietaria del 'CD Estoril II' se derrumba ante Chicote: "Mis hijas dicen que soy mala madre, es difícil para ellas"
Chicote sabe que Dari y Álex, propietarios del 'CD Estoril II', tienen que cambiar su forma de gestionar el club, pero para conocer la urgencia de ese cambio es necesario que la pareja comparta con el chef su realidad.