Las mujeres con poder no siempre caen bien, tal y como, desgraciadamente, le ocurrió a Emilia Pardo Bazán.
Esta mítica escritora patria, cuando intentó entrar en la Real Academia Española, los viriles intelectuales españoles la insultaron, por ejemplo, llamándola "fea", "gorda", o "puta". Comentarios que, actualmente, se han escuchado contra políticas.
"La violencia mediática, social y cultural que reciben las mujeres que acceden a espacios de poder es una realidad muy amplia y, por desgracia, muy normalizada", explica Paula Iglesias, historiadora y máster en Estudios de Género.
"Este tipo de comentarios y de campañas que, ahora mismo, tienen todo el eco en redes y que llegan de manera muy directa a las mujeres que se exponen públicamente sirven para desincentivar a muchas mujeres que deciden no exponerse porque no están dispuestas a soportar ese grado de violencia y acoso", añade Ana Requena, redactora jefa de Género en eldiario.es.
Así funcionaba la trama
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