Concha y Paula, hija y bisnieta de una de las primeras mujeres en votar en España, escuchan las canciones de Rocío Jurado. "Ella fue de las primeras en este país en llamarse feminista", relata Paula Iglesias, historiadora, máster en Estudios de Género.
Rocío Jurado publicó 'Lo siento mi amor' en 1978. "Una canción valiente para la época, era única. Fue una mujer que puso en los puños en la mesa y dejó claro que no era menos que un hombre", describe Concha.
"Pone sobre la mesa que las mujeres también pueden hablar de sexo en la música y que tienen derecho a reivindicar y hablar de sexo", añade Paula Iglesias.
"No se había hablado abiertamente en la música que las mujeres también tienen derecho a disfrutar del sexo, parece que las mujeres teníamos siempre un papel pasivo en las relaciones sexuales, solo doliente. Pero Rocío Jurado habla abiertamente del deseo y del derecho a tener ese deseo", sostiene Lidia García, autora de '¡Ay, campaneras!".
Fue una oda a la liberación sexual de una Rocío Jurado que en plena dictadura franquista ya había lucido escotes contra la censura.
Era 1974 y aunque cantaba un tema muy patriótico, 'Soy de España', su vestido no se entendió y la folclórica escandalizó con su escote a parte del público.
En 1991 en el programa 'De tú a tú', la artista recordaba que "hubo un gran escándalo" porque "era una gasa y con los focos fuertes desapareció y parecía que era la piel directamente".
"Los censores franquistas siempre iban de cabeza con Rocío Jurado midiéndole los escotes y viendo qué cantidad de tela era la adecuada. Ella nunca se achantó con esto, siempre se presentó como le apetecía y creó mucha polémica e intentos de censura", sostiene Lidia García.
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