A pesar de que los animadores turísticos disfrutan de ciertas ventajas en comparación con otros trabajadores del sector de la hostelería, Jordi Cayetano destaca que aún queda mucho por mejorar en términos de derechos laborales.

"Los animadores turísticos dentro del sector de la hostelería son los que mejor están", comenta Cayetano, explicando que, a diferencia de otros trabajadores, a ellos se les ofrece alojamiento y comida. Sin embargo, rápidamente añade que estas ventajas no compensan las condiciones de trabajo a las que están sometidos. "Es cierto que las condiciones siguen siendo ilegales. Son tres turnos al día, un día de fiesta. Estás todo el día trabajando", confiesa, dejando en evidencia la realidad a la que se enfrentan muchos profesionales del entretenimiento en destinos turísticos.

El problema se agrava cuando se considera la remuneración. A pesar de las largas jornadas y la intensidad del trabajo, el sueldo que reciben estos trabajadores no refleja el esfuerzo y dedicación que ponen en su labor diaria. "El sueldo podría ser mejor", señala Cayetano, subrayando la falta de reconocimiento económico que sufren en un sector que, aunque vital para la industria turística, parece no valorar adecuadamente a sus empleados.