Cristiano Ronaldofue uno de los grandes protagonistas del partido que Portugal jugó ante Eslovaquia. El luso, delantero del Al Nassr de la liga de Arabia Saudí, no marcó pero una acción suya sobre Dubravka, portero eslovaco, causó gran ira tanto en los jugadores como en la afición rival.
Porque bien pudo ser roja. Porque bien pudo poner rumbo a vestuarios. Porque la jugada, que tuvo lugar en el minuto 61 bien pudo haber cambiado el devenir del encuentro.
No es lo mismo un 0-1 contra once que un 0-1 contra diez, y a saber si Eslovaquia podría haber igualado en esa media hora el tanto de Bruno Fernandes.
Sin embargo, no hubo expulsión. Porque todo quedó en amarilla. Todo quedó en una amonestación después de que Cristiano realizase una peligrosa acción ante Dubravka.
Fue en una jugada en la que el balón iba directo hacia el arquero. Cristiano corrió a por la bola para pelear la jugada, pero con el portero ya con el cuero se lanzó con los dos pies por delante mostrando los tacos.
Impactó en el pecho, y en la cara, del portero eslovaco, que se quedó en el suelo dolorido.
Inmediatamente, y consciente de lo que había sucedido, Cristiano se disculpó con Dubravka. Posiblemente esas rápidas disculpas pudieron librarle de la expulsión...
Al final, 0-1 para Portugal y 15 de 15 en su camino a la Eurocopa 2024.