Enfocado en su faceta ecologista sobre todo en el último año, Sebastian Vettel ha vuelto a cagar contra el 'ecosistema' del 'Gran Circo' por lo visto en la ceremonia previa al arranque del Gran Premio de Italia en Monza.
El tetracampeón del mundo de Fórmula 1 ha criticado al presidente de la República italiana, Sergio Mattarella, por dicho "acto de egoísmo" hacia el planeta.
"Me dijeron que el presidente italiano, Sergio Mattarella, apretó mucho hasta lograr que se hiciera el habitual desfile de la 'Frecce tricolor'. Él tiene casi cien años. Lo veo como un acto de egoísmo y para él no es fácil entenderlo viendo su edad", ha explicado en 'Die Zeit'.
"Este deporte había prometido que cosas de este tipo no se volverían a repetir, pero, pese a ello, decidieron inclinarse ante el presidente. Todo esto va en contraposición con los acuerdos fijados sobre el hecho de querer eliminar las emisiones en los próximos años", ha señalado.
"Nos habíamos fijado unos objetivos para hacer del planeta un lugar mejor y más habitable, con lo que no debemos descuidarlos a la primera ocasión que pasa", ha añadido.
Paralelamente, le han preguntado por su futuro lejos de la Fórmula 1 y, en su línea, Vettel ha sorprendido afirmando que le gustaría decantarse por la carpintería o la agricultura.
"Me gusta mucho jugar con la madera. Quién sabe, tal vez haga un curso para ser carpintero. Tal vez me llene tanto que sólo me dedique a construir sillas después. O digo, después de un año,: "Es divertido hacer algo de vez en cuando, pero ese no tiene por qué ser mi propósito en la vida ahora'", ha apuntado.
"Hay muchas maneras de enfocar la agricultura. Yo no era consciente de eso antes. ¿De dónde viene nuestra comida? ¿Por qué? Por un lado, esto es muy analógico, pero, por otro lado, también está conectado a la tecnología, a la tecnología nueva y moderna", ha zanjado el alemán.