Con el cambio de reglamento que ha traído 2022, Red Bull empezó la nueva temporada como vigente campeón de Fórmula 1 con un doble abandono en Baréin por problemas de fiabilidad del RB18.
Con el paso de las carreras, mientras Ferrari 'monopolizaba' los dos primeros cajones del podio, el monoplaza cobró más seguridad y comenzó la remontada de Max Verstappen sobre Charles Leclerc, llegando hasta el punto de poder revalidar su corona en la próxima carrera.
Con el Mundial de Pilotos y Constructores en el bolsillo, Red Bull sabe que de cara al año que viene esto les penalizará y, por ende, deberán buscar otras 'zonas grises' para no perder comba con Ferrari, Mercedes, Alpine y Aston Martin, los cuatro equipos que se espera que puedan luchar por la zona alta.
"El próximo año tenemos algunos cambios en las reglas y nosotros tenemos menos recursos que nuestros rivales en términos aerodinámicos o de horas de uso del túnel de viento y el CFD por nuestros resultados en el campeonato de constructores", ha explicado Paul Monaghan, ingeniero jefe de Red Bull.
"Podría contraargumentar que tenemos a los mejores empleados en nuestra fábrica, pero esa es una visión quizás un poco egocéntrica. Así que no estoy seguro de que el rendimiento de este año pueda trasladarse a 2023, no puedo decir que la recta final de esta temporada sea beneficiosa para nosotros el próximo año", ha añadido en declaraciones recogidas por 'Motorsport'.
Según Monaghan, deben minimizar los 'déficits' que se encuentren el próximo mes de marzo: "Tenemos que movernos como mínimo al ritmo de nuestros rivales. Tenemos que gestionar bien los cambios de reglas para la altura de los bordes del suelo, así como el cambio de rigidez, intentando perder menos que nuestros rivales o como mucho la misma cantidad".
Eso sí, que nadie dude de que Red Bull estará arriba: "Obviamente creo que seguiremos siendo competitivos el año que viene. Pero si la pregunta es si podemos repetir lo que estamos haciendo ahora mismo, no estoy seguro".
"Haremos el mejor trabajo que podamos con algunos de los mejores empleados del pitlane, y luego juzgaremos lo que hemos sido capaces después de una, dos o tres carreras, ¿no?", ha zanjado el ingeniero jefe de Red Bull.