Fernando Alonso ha terminado por todo lo alto el 2023. Con un cuarto en el Mundial de pilotos, su mejor puesto desde 2013, y con ocho podios. Con ocho cajones que le hacen ser, tras los dos Red Bull, quien más ha degustado el sabor del champán. Todo, con Aston Martin.
Con un equipo por el que cuando firmó, era penúltimo del Mundial de constructores. Con un equipo que, con él, ya mira hacia arriba. Ya mira hacia algo más que el podio.
Mira hacia la victoria. Victoria que parecía un sueño antes del comienzo de curso y que comenzó a ser algo más que posible con un GP de Mónaco en el que por poco no llegó la 33.
"He puesto Monza a propósito"
Ahora, Fernando Alonso ha pasado revista a un curso en el que ha querido destacar cinco carreras. Y una de ellas por un motivo especial.
"Bahrein, Mónaco, Canadá, Monza y Brasil", cuenta Fernando Alonso en palabras en 'racingnews365'.
En cuatro de ellas, podio. En Monza, noveno. Pero fue un noveno más que importante.
"Lo puse a propósito porque fue un P9 cuando quizá teníamos el coche más lento. O el segundo más lento", afirma.
Buena razón tiene, pues en Italia lo que más se tiene en cuenta es la velocidad en recta y es justo donde flojea Aston Martin.
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Es ese el principal talón de Aquiles de un equipo que sabe qué tiene que mejorar. Que sabe cuál es el punto débil que tanta factura les ha pasado en circuitos como el de Monza.
