No ha sido el día para Fernando Alonso en Bélgica. El asturiano ha terminado abandonando en la carrera al sprint después de una mañana en la que ni pudo tener un tiempo cronometrado en la Q2 por un error garrafal de Aston Martin.
Y lo ha hecho por un, sí, error suyo. Uno en el que, en plena pelea con Nico Hulkenberg, terminó en la grava tras un trompo en el que hizo un par de 360 y después de casi impactar con el muro de Spa.
Fernando, después de la prueba, fue totalmente autocrítico: "Un fallo mío... acabé en la grava".
"Íbamos a coger 0 puntos, así que 0 puntos desde la gravilla", insiste Alonso en un fin de semana que de momento no está siendo como el querría.
Y lo sabe: "Es un día gris. Gris oscuro. No pudimos hacer una vuelta en Q2 y sales muy atrás. Ya tras el safety car quisimos poner intermedios, pero con Stroll delante..."
Ahora ya toca mirar al futuro: "Cero puntos con los dos coches... ojalá en carrera podamos puntuar con los dos".
"Veremos si se puede rodar en seco, y ojalá podamos pasar página", sentencia en palabras en 'DAZN'.