Fernando Alonso ha tenido días mejores que el de hoy en la clasificación del Gran Premio de Australia. El fin de semana del asturiano era muy prometedor teniendo en cuenta el ritmo mostrado el viernes tanto en las tandas largas como, especialmente, en las simulaciones a una vuelta.
Las buenas sensaciones se confirmaron en la Q1 y la Q2, donde Alonso fue muy competitivo y rodó en tiempos cercanos a los de Max Verstappen y Carlos Sainz, que han sido los claros dominadores de la clasificación. Sin embargo, todo se torció en la Q3.
En el primer intento, Fernando Alonso sufrió una salida de pista que le obligó a abortar el giro. Volvió al garaje para cambiar los neumáticos y buscar una segunda vuelta lanzada, pero el coche no respondió.
El daño en el fondo plano era evidente, lo que impidió al '14' hacer un tiempo competitivo, condenándole a la décima posición en la que arrancará este domingo.
Tras la clasificación, el bicampeón del mundo ha valorado su actuación. "Ha sido una 'qualy' complicada. Hemos sido menos competitivos que en las dos carreras anteriores y necesitamos encontrar más ritmo para mañana. Tenemos ambos coches en el 'top 10', noveno y décimo, ojalá podamos mejorar esas posiciones", ha dicho Alonso en declaraciones para las redes sociales de Aston Martin.
Sin embargo, cree que surgirán oportunidades para remontar y asegura que la carrera será caótica: "El circuito es muy complicado y la carrera va a ser muy larga y demandante para los neumáticos. El año pasado vimos coches de seguridad y banderas rojas, así que necesitamos estar muy concentrtados y evitar los errores".
El asturiano no ha querido pasar por alto su fallo en la Q3 y ha hecho autocrítica tras la clasificación. "No he hecho un buen trabajo hoy, lo haré mejor mañana y recuperaré todo lo que hemos perdido hoy", ha concluido Fernando Alonso.