Esta semana vuelve la Fórmula 1 por segundo fin de semana consecutivo y lo hace en uno de los circuitos más deseados y amados por los fans: el Gran Premio de Bélgica.
Además, si al circuito de Spa-Francorchamps le sumas la probabilidad real de que la carrera se dispute sobre mojado, todo cobra aún más expectación. Esta vez, no solo podría llover en la carrera, sino que lo podría hacer en todas las sesiones.
Hay que destacar que, si el fin de semana se desarrollara con normalidad y sobre seco, no habría muchas sorpresas y el gran favorito volvería a ser, una vez más, el Red Bull de Max Verstappen.
No obstante, la lluvia lo cambia todo e iguala en gran medida las prestaciones de los monoplazas hasta tal punto que la diferencia radicaría en las manos del piloto.
El viernes se esperan precipitaciones con una probabilidad de más del 80%, por lo que lo más probable es que la sesión de clasificación del viernes y la sesión de libres sean pasadas por agua.
Asimismo, el sábado también se esperan grandes precipitaciones por encima del 70% y esto derivaría en una sesión de carrera al sprint también sobre mojado, por lo que podría ganar cualquiera.
El domingo la cosa podría cambiar. Si bien es cierto que la carrera podría desarrollarse con la pista fría y sin agua, algo que perjudicaría en gran medida a Aston Martin, las probabilidades ascienden a un 60%, por lo que la F1 podría vivir una emocionante carrera en la que, surcando las aguas, Fernando Alonso podría pelear por la 33.
La última vez que diluvió en Bélgica
La lluvia realmente ofrece un espectáculomayor al Gran Premio. Sin embargo, la últimavez que diluvió en el circuito de SPA no dejó muy buenos recuerdos a los aficionados que estaban allí presentes.
En 2021, cuando todo apuntaba a que viviríamos un trepidante Gran Premio pasado por agua en el que George Russell, con un Williams, partía segundo, nada más lejos de la realidad.
Debido a la gran cantidad de agua que había sobre la pista, la F1 decidió suspender la carrera y dar unas pocas vueltas detrás del Safety Car para repartir, así, la mitad de los puntos. Sin duda una gestión terrible por parte del 'Gran Circo' que se espera que no vuelva a suceder.