Carlos Alcaraz no deja indiferente a nadie. En apenas dos años ha pasado de irrumpir en el circuito ATP a consolidarse como número 1 del mundo, asombrando tanto a los aficionados como al resto de tenistas.

El último en halagar al murciano ha sido Nick Kyrgios. El australiano ha hablado sobre cómo llega Alcaraz a Wimbledon, y ha mostrado su asombro por la gran proyección que lleva.

"Ver lo que Alcaraz ha sido capaz de hacer en tan poco tiempo es una locura. Tiene mucha disciplina y le encanta el deporte. Es divertido de ver. Tiene muchas ganas de hacerlo bien, pero también lleva un 'showman' dentro, y eso me gusta. Le encanta involucrar a los espectadores, que la gente coree su nombre, lo cual es genial", ha declarado Kyrgios en rueda de prensa.

El australiano no atraviesa su mejor momento. Llega a la cita londinense en el puesto 33 del ranking ATP y en plena adaptación tras operarse de una lesión en la rodilla, por lo que asegura que se tomará Wimbledon como una toma de contacto con las pistas.

"He estado entrenándome con algunos jugadores realmente buenos esta semana y mi cuerpo se siente bien. No voy a mirar hacia adelante y ponerme expectativas injustas a mí mismo. Solo voy a tratar de hacer todo lo que pueda, prepararme, salir y jugar buen tenis", ha justificado Kyrgios.

Esa falta de ritmo provocó que perdiese ante el chino Wy Yibing en su primer partido en el Torneo de Stuttgart, dando pie a un aluvión de críticas que el australiano intenta ignorar.

"Todo el mundo espera que seas el mismo jugador de inmediato. Eso es muy difícil. Perdí y las críticas fueron enormes. En mi primer partido fue difícil ser el mismo jugador que era de inmediato. Trato de encontrar es tenis que mostré el año pasado, y no creo que eso sea justo en este momento", ha explicado.

A pesar de ello, asegura que competirá para intentar ganar en Wimbledon. "Nunca he sido un jugador que necesite muchos partidos antes de jugar un Grand Slam. Siempre he sido partidario de no jugar demasiado", concluyó Kyrgios.