Una aficionada que acudió al partido entre Rafa Nadal y Michael Mmoh se ha convertido en la protagonista de la jornada del Open de Australia por los gestos en la grada al tenista español.
Y el número 2 del mundo, claro, ha sido preguntado por este hecho en sala de prensa después de su victoria en segunda ronda: "Creo que estaba bebida, no sé si demasiado gin o tequila. Ha sido una situación divertida".
"No entiendo por qué lo ha hecho, pero hay gente para todo en este mundo. Ha hecho lo que su estado le permitía en ese momento. Se ha ganado a pulso que la echaran porque me ha molestado a mí y a mi rival", explico el tenista.
Además, al comienzo de la rueda de prensa le comentó a su jefe de prensa que el gesto de la mujer fue para él y no para el árbitro, algo que no entendió. "Fue a mí, a mí...", decía con una sonrisa en el rostro.
El español avanza de ronda en el primer Grand Slam de la temporada a pesar de sus problemas de espalda que le impiden sacar con normalidad. Y de momento sin complicaciones.