Nick Kyrgios no hace distinciones. Le da igual que sean jueces de silla, rivales, público adulto... o niños. El tenista australiano dio un consejo completamente surrealista ante el que no daba crédito ninguno de los asistentes presentes.
"Qué gustos raros tiene si quieren dedicarse al tenis... lo siento. Gustos raros... a mí me gusta más el baloncesto. Alguien les habrá dicho que no sean como yo, pero aquí están viéndome", afirma el australiano.
Kyrgios siempre da la nota, tanto con la raqueta como sobre todo sin ella. Los niños y las niñas presentes a la cancha se quedaron total y absolutamente patidifusos... y no es para menos.