A Ricardo Costa no ha hecho falta ni preguntarle en el juicio de la Gürtel, al que iba dispuesto a cantar, tal y como ha hecho. Ha confirmado los pagos en negro de actos de campaña reconociendo que "es cierto que el PP se financiaba con dinero negro". "El dinero eran aportaciones en efectivo de empresarios que tenían contratos con la Generalitat", detallaba sobre la procedencia de esos fondos.
También explica que el sistema era anterior al periodo que se juzga porque estaba "preestablecido anteriormente".
En 2007 fue cuando se ideó una nueva forma de financiar al partido, la de "emitir facturas por parte de Orange Market a empresarios para pagar actos del Partido Popular". Según Ricardo Costa, la idea y la orden para que se hiciese así fue de Francisco Camps y de Juan Cotino.
Pero hay más nombres, como Vicente Rambla o Víctor Campos. Todos, de una u otra forma, conocían y participaron en la financiación ilegal. También era conocida en Génova, ya que el propio Costa estuvo en la sede del PP nacional para contársela al entonces gerente, Luis Bárcenas, quien explicó que esa era una práctica prohibida en el PP. "Sería un Filesa 2", decía Bárcenas.
Un Filesa 2 que se produjo a pesar en la advertencia, así como también se hizo en la campaña de 2008 a nivel nacional.
Costa ha resucitado un viejo fantasma de Francisco Camps. Asegura que 'el bigotes' quiso pasar al PP una factura de 20.000 euros para "pagar gastos del señor Camps en prendas de vestir".