La final del Masters 1000 de Cincinnati disputada este domingo que se saldó con victoria de Novak Djokovic ante Carlos Alcaraz por 5-7, 7-6(7) y 7-6(4) puede ser, junto a la de Wimbledon, el mejor partido de lo que va de temporada.

El murciano llevó al extremo al serbio, que celebró la victoria como pocas veces se le ha visto después de que el español le levantase varios puntos de partido con golpes imposibles.

Tal fue la exigencia que tuvo que tras levantar el título, 'Nole' comparó su rivalidad con Alcaraz con la que mantuvo con Rafa Nadal.

"Me recuerda un poco cuando me medía con Nadal, cuando estábamos al máximo de nuestras carreras. Cada punto es una batalla. Sabes que no te va a regalar más de cinco puntos en todo el partido. Tienes que ganarte cada punto", expresó.

"No he jugado muchos partidos como éste en mi vida. Quizás lo puedo comparar con la final con Nadal en el Abierto de Australia de 2012, hoy fue tres sets y casi cuatro horas. Es uno de los partidos más ilusionantes y duros a nivel mental, emocional y físico que he jugado en mi carrera", añadió.

Sobre Carlitos, Djokovic afirma que ya no es una promesa, sino una realidad que va a ir a más teniendo en cuenta su corta edad.

"Ya no me sorprende. Quizás sorprendía al final del año pasado, o al comienzo de este año. Salió de momentos complicados, fue a por ello, con coraje. Sólo te puedes quitar el sombrero ante un chico como él, que juega con madurez, que aguanta la presión de esta manera a los veinte años. No hay que olvidarse de su edad. Es algo impresionante", zanjó el número 2 del mundo.

XX

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