En la última temporada de El Intermedio, la reportera Thais Villas acudió al Congreso de los Diputados para sondear a varios políticos españoles y averiguar cómo manejan las discusiones en sus casas.

Borja Sémper, del Partido Popular, fue uno de los primeros en responder a las preguntas de Villas. Según el popular, lo que más le incomoda es que sus hijos no se duerman a la hora prevista. Aunque intenta mantener una educación positiva, confesó que a veces recurre a un tono más firme: "Iros a la cama de una p*** vez, porque lo digo yo", admitió entre risas.

Por su parte, Elma Saiz, reveló que tiende a ser "discutidora". Saiz indicó que a menudo se encuentra en medio de una discusión en cuanto llega a casa, sobre todo si tiene hambre o prisa. "A veces estoy llegando a casa y sé que hoy vamos a tener un mini pollo", reconoció con franqueza.

Mientras que Gabriel Rufián confesó que no soporta las pataletas y que tiene discusiones con su pareja, principalmente sobre la colada, debido a su falta de escrúpulos al distinguir colores. A pesar de su aversión a los conflictos, sorprendió al mencionar que es "anti polémicas" en el ámbito familiar.

"Hablo súper poco, intento que hablen los demás... paso de todo", explicó. Rufián también compartió que, cuando la gente está un poco más relajada tras unas copas, suelen preguntarle sobre su relación con Thais Villas. "Yo digo que eres estupenda, maravillosa, que es mi mejor momento de la semana", afirmó.

En el espectro de quienes se involucran en las discusiones, Íñigo Errejón y Aitor Esteban se identificaron como personajes activos en lo que se refiere a las 'broncas' domésticas. Errejón, portavoz de Sumar, se describió como "muy pendenciero" y explicó que, aunque no discuten de política porque todos en su familia son de ideología similar, a menudo se enzarzan en discusiones sobre temas menores.

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